Muchas personas suelen hacerse esta gran pregunta.
¡Esto puede ocurrir por diferentes factores!
- La clienta tiene la uña muy grasa o muy débil. (Se doblan, se parte y se sale el gel)
- La clienta se muerde sus uñas o se las toca hasta sacar el gel.
- Los productos utilizados no son de buena calidad.
- La preparación de la uña no fue la correcta.
- Al aplicar el gel tocas la piel.
- La uña de la clienta coge sucio o grasa (porque se toca la cara o el pelo mientras se le realiza el servicio)
- La lámpara no tiene los suficientes watt para secar completamente sus uñas
Hay muchos factores, por eso deben trabajar con previos conocimientos de manicura y algo sumamente importante usar productos profesionales de excelente calidad.
¿Te ha pasado alguna vez?🤔